miércoles, 18 de septiembre de 2013

Y sin Embargo....

Ni tu mueres de celos, ni yo muero por ti....
Lo peor del Amor es cuando pasa, que el punto final de los finales no le sigan dos puntos suspensivos.....
 
Y me envenenan los besos que voy dando...
 
"El" ya la estaba tomando como una "imbécil", el sabia que ella siempre lo iba a perdonar. El sabia que se iba a encontrar nuevamente en su casa, con un 1/4 de helado y pidiéndole perdón. Por sus defectos, sus virtudes y porque no? Quererla de una manera diferente a la que ella estaba acostumbrada. El sabia que excusas decirle, como endulzar el oído y ella se iba a quedar engatusadas a sus encantos. Esperando escuchar las respuestas que el tanto quería brindarles.
¿En que momento Había pasado? Ni ella lo sabia expresar, pero cuando se sentó en su computador, para poder visualizar y distraer su mente. La noticia se encontraba pegándole en los ojos.
Sin decir mas nada, esta vez no reclamaba una explicación, no reclamaba helado, ni mucho menos lo estaba reclamando a el.
Ella sin que el se diera cuenta ya le estaba poniéndole el punto final a algo que de hace rato tendría que haber estado.
Los mensajes llegaron "Te Quiero Ver", "Te extraño", no le interesaba ser perfecta, ni ser la indicada.
Ella se había cansado de sus excusas, se podría decir que se canso de el. Tanto le costaba dar besos a una sola? Ella lo quería y hasta hubiera cambiado por el. Pero todo lo bueno tiene un final y todo lo que el destino no lo va soltando. Lo suelta esa persona.
Esta vez a ella le tocaba ser querida, y cuando menos lo esperamos. Aparecen esas personas para pegarnos los trocitos del alma. Para llenarnos de felicidad y para hacernos sentir importantes y/o apapachados. ¿Cómo puede ser que esas personas siempre estén y nunca las podamos observar detalladamente? Eso nos pasa por estar observando detalles de otras personas que ni siquiera nos llegan a los talones.....
 
Por lo menos la protagonista prefirió un amor sincero, que seguir engordando con 1/4 de helado y excusas baratas del barrio de San Telmo.
 
"Y la vida siguió como siguen las cosas que no tienen mucho sentido"